...se REQUIERE que trabajemos otra hora.
después, el mismo plan:
otra y otra,
hasta que llegás a las podridas 12.
está bien,
12 y 8 horas para dormir son 20.
más la hora del almuerzo, 21.
desayuno,
cena,
viajar,
cagar,
afeitarse,
vestirse,
desvestirse,
decirle algo a tus hijos,
mirar un minuto la pared,
y todas las otras cosas,
peluquería,
compar zapatos,
sacarse una muela,
tratar de arrancar el auto,
matar una mosa ... 24 horas,
y ya tenés que volver.
Es un extracto de una carta de Charles Bukowsky a Dougas Biazek del 6 de abril de 1966. Esto tiene que ver con el post de catarsis, en ese momento no encontré el texto, pero mi amiga Analia me lo facilitó. Gracias! Si alguien quiere el texto completo me avisa y se lo transcribo, no tiene desperdicio.
3 comentarios:
Generalmente, no me gusta Bukowsky, pero en esto hay que ponerse de pie y aplaudirlo. Tiene toda la razón. El secreto está (creo) en hacer todo (por más que no nos guste) con la mejor buena onda. Tratar de pasarlo bien siempre. Aunque las cosas no siempre vayan bien.
Algún día te contaré, Maga, tooooodas las cosas feas que me pasaron. Pero aprendí a disfrutar de las pequeñas cosas, esas no se borran.
Besos!
Generalmente a mi me gusta leerlo, en el fondo tiene unos sentimientos muy nobles, como lo que refleja en lo que transcribí.
Soy todo oidos cuando tengas ganas Mangosta, paula.lavini@gmail.com
Yo también soy de la corriente de disfrutar de las pequeñas cosas, del día a día, de los pequeños momentos, del camino, pero hay días ... en que lo grande me supera y aplasta a las pequeñas cosas como un elefante a una hormiga.
Un beso grande!
Gracias por visitarme!
que bueno que lo encontraste!
a mi me parece que esto tiene que servir de disparador para no caer en la rutina o en los moldes o casillas en donde nos metemos sin darnos cuenta y patear el tablero aunque mas no sea por un rato.
saludos
mariano , CEO de Lo de Suarez Vidal
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